miércoles, 28 de noviembre de 2012

Una tienda en París - Máxim Huerta

Teresa es una mujer con una vida bastante anodina y gris. Vive sola en un ático, tiene un trabajo bastante anodino en la empresa familiar y el único pariente que le queda es una vieja y gruñona tía con la que creció. Su madre murió cuando ella tenía siete años y la tutela de Teresa fue a parar a la hermana gemela, la tía Brígida.

Así su infancia y adolescencia fue muy triste. Maltratada por un tía con muy mal carácter  y  absurdamente severa no llegó a sentir ningún afecto ni cariño de su parte. La rigurosa Brígida, ejercía un control absoluto sobre su vida. No solo le indicaba cuando y como debía hablar, como debía vestir y vigilaba sus estudios con una voluntad férrea.

En cuando Teresa terminó sus estudios decidió emanciparse y marcharse a vivir en soledad a un ático heredado de sus padres. Aún así su existencia no ha mejorado. Para distraerse asiste a unas clases de pintura que tampoco terminan de llenar su vacío interior.

Lo que más desea es añadir al color a su vida, al igual que a sus dibujos. Pero una tarde paseando por las calles de Madrid siente la imperiosa necesidad de entrar a una tienda de antigüedades. Allí la espera un cartel rescatado de una tienda de Paris que cambiara su vida para siempre.

Es a partir de ese momento cuando Teresa siente las fuerzas necesarias para abandonarlo todo y comenzar de nuevo.

Mi experiencia con la novela

Máxim Huerta es una cara bastante conocida del mundo de la televisión. Actualmente podemos verlo en un conocido magazine pero sus comienzos fueron en los informativos. A veces cuesta trabajo trasladar una figura mediática a la faceta de escritor. No es que yo tenga nada en contra de él sino que en ocasiones me cuesta otorgar cierta seriedad a las caras que relaciono con la pequeña pantalla. Antes de que este libro llegase a mis manos no me había planteado la posibilidad de acercarme a ninguna de sus novelas. Después de leerlo mi opinión se podría resumir muy fácilmente. Se trata de una novela muy entretenida que aunque tiene algunos aspectos no tan positivos he llegado a disfrutar ampliamente.
 “Una tienda en París” es una novela protagonizada por dos mujeres, Teresa y Alice, muy diferentes entre sí y que vivieron épocas muy diferentes. A lo largo de la novela el autor disecciona un fragmento de sus vidas.
El relato comienza presentándonos a Teresa, una mujer aburrida de todo. Cansada de su vida, de su trabajo y hasta de los colores grises que emplea en las clases de pintura a las que asiste. Procedente de una familia acomodada y traumatizada en su infancia por su tía Brígida se siente incapaz de tomar ciertas decisiones. Es consciente de que necesita un cambio de rumbo en su vida, añadir color, dejar llevar y vivir nuevas experiencias pero es incapaz de lanzarse hacia el vacío.
Cuando por casualidad encuentra un cartel en una tienda de antigüedades se siente irremediable atraída por ese objeto. Se trata de un letrero de principios del siglo XX que anuncia una tienda de tejidos ubicado en París. En el mismo hay escrito un nombre, Alice Humbert y una dirección. Teresa comienza a preguntarse quién fue esa mujer, cómo fue su vida y qué fue de ella. Y así es como comienza a indagar en la vida de Alice y para ello no hay mejor manera que viajar en persona a la ciudad de la luz y comenzar su búsqueda en la propia tienda.
La vida de Alice es completamente opuesta a la Teresa. Una mujer nacida en una familia humilde que logró codearse con la flor y nata de la sociedad parisina de los años veinte. Todo comenzó con unos posados desnudos para distintos fotógrafos. A partir de entonces su vida comenzó a cambiar rodeándose de gente famosa, un ambiente chic, a vestir los mejores diseños y a beber champán en las fiestas de moda olvidándose de la modesta muchacha que un día fue.
Es cierto que al comienzo de la novela me costó entrar en la historia. Los primeros capítulos me parecían más de lo mismo y me recordaban a tantas otras novelas leídas. Tenía la sensación de que no me aportaba nuevo. Pero después de leer tres o cuatro capítulos comencé a notarme cada vez más a gusto entre sus páginas y con la necesidad de continuar descubriendo la historia.
Uno de los principales problemas que tuve al comienzo fue una de las protagonistas, Teresa. Me costó conectar con ella, con su actitud tan temerosa, con esa indecisión. Es verdad que el autor consigue transmitir esa apatía que el personaje no me pareció especialmente atractivo.  Además en los primeros capítulos ocurre poca cosa porque son una especie de introducción. Simplemente nos va narrando cómo fue la vida de Teresa. En cambio cuando aparece en escena la brillante Alice enseguida me sentí atraía por ella. Es un personaje fuerte, carismático y seductor.
En realidad Alice es el punto fuerte de la novela, el detonante de la historia y el que hace que merezca la pena acercarse a esta novela. Imposible no encandilarse con este personaje que prácticamente de la nada consigue llegar a conocer lo mejor de París y  a tener su propia tienda. En el fondo nunca muere la sencilla y necesitada muchacha que un día fue y sus orígenes terminarán por determinar su final.
El estilo de Máxim Huerta es muy sencillo. Parco en florituras y filigranas pero muy rico en adjetivos e incluso melodioso. La amplia presencia de los diálogos lo que hace que su lectura sea muy ágil. El vocabulario que usa es muy sencillo aunque en ocasiones me ha parecido demasiado coloquial. Narrada en primera persona por cada una de sus protagonistas está salpicada de recuerdos de su infancia, de sus sensaciones y sus sentimientos. Cada mujer que protagoniza esta historia tiene una vida completamente diferente a la de la otra aunque llega un momento en el que puede establecerse cierto paralelismo en sus vidas.
La historia se desarrolla en dos épocas alternando capítulos entre las protagonistas. Pero no me ha gustado la transición entre ellos. Los capítulos están simplemente numerados y nada nos indica que hemos pasado de una época a otra de forma que en ocasiones me ha resultado difícil identificar el personaje hasta haber leído un buen fragmento.
El libro está bien ambientado. Me ha gustado sobre todo como recrea el ambiente de Paris en los años veinte. Lleno de esplendor, de lujo, de fiestas, de artistas, modelos, mujeres impresionantes y hombres divertidos por donde circulan personajes tan conocidos como Coco Chanel.
Uno de los puntos que definitivamente no me ha convencida es el de las presencias espirituales. Sin contar nada más y para los que hayáis leído el libro creo que la historia podría llegar a entenderse igualmente sin introducir este elemento que aporta un toque de irrealidad en la historia.  Tampoco me gusta la reaparición de personajes que se supone que han ya han caducado en la historia y que damos por desparecidos.
El final de la novela es bastante abierto. Es cierto que muchos asuntos quedan más o menos resueltos pero otros muchos quedan en el aire dejándolos a la libre interpretación del lector. Esta es una novela que perfectamente podría continuar en una segunda parte. Como ya he dicho se centra tan solo en un fragmento de las vidas de las protagonistas.
Conclusión
A pesar de los pequeños inconvenientes que he encontrado en esta novela he disfrutado con su lectura una vez fui capaz de hacerme con la historia. “Una tienda en París” es una historia que cuenta con muchas emociones, que nos habla de amor, de París, de la vida y de la importancia de las segundas oportunidades.  Muy recomendable su lectura.

martes, 27 de noviembre de 2012

Lectura, ¿Digital o en papel?

El otro día leí una noticia que me dejó impactada. En Inglaterra, la web Amazon ha visto como sus ventas en formato digital ha superado con creces la venta en formato papel. Algo impensable hace un par de años. El sector no terminaba de arrancar pero lo cierto es que en los últimos meses está tomando una fuerza desmesurada. España es el segundo país de Europa en cuanto a venta de lectores digitales. Mientras que caen las ventas del formato tradicional cada vez hay más lectores que apuestan por el formato digital.

El libro es el único formato que ha permanecido inmutable durante siglos mientras el mundo de la música, la imágenes o los videos se han ido transformando paulatinamente y varias veces dando lugar a distintos formatos a los cuales nos hemos tenido que acostumbrar.

Pero ¿Cuál es el futuro de la industria editorial? ¿Llegarán a desaparecer los libros en favor de los eBooks?

Hasta hace unos meses no me había planteado la posibilidad de realizar mis lecturas a través de un libro electrónico. Siempre he sido muy reticente a abandonar el formato papel. Me encanta tener los libros en la mano, acariciarlos, olerlos y ordenarlos en las estanterías. Me gusta mucho cogerlos de vez en cuando y, sobre todo de aquellos que me hicieron disfrutar, leer de vez en cuando algún fragmento.

El tema del lector no me acababa de convencer. Me parecía un sistema demasiado frío y ajeno al lector. Pero fueron dos cosas fundamentales las que me hicieron plantearme su adquisición. Una es que estoy empezando a tener un serio problema de espacio en casa en cuanto al almacenamiento de libros que ya empiezan a ocupar los lugares más insospechados y en segundo lugar, la cantidad de libros electrónicos que ya pululan por la red.

Después de probar el lector he podido comprobar que es un sistema muy cómodo para leer. En tan solo 190 gramos puedes almacenar cientos de libros. No importa la longitud del libro en cuestión lo puedes llevar a cualquier sitio en el bolso. Hay lugares donde debes esperar y es de agradecer tener un entretenimiento a mano. Con el formato papel esto se hace más difícil. El cargar con un libro de seiscientas páginas en tapa dura no es una tarea fácil ni agradable.

También es mucho más accesible su lectura en multitud de posiciones. Si te gusta leer tumbado o dejar el libro sobre las piernas es un formato muy adecuado. No tienes que sujetar el libro con la mano, que cuando tienen peso y llevas un rato la mano se agarrota y hay que cambiar la posición. 

El ahorro de papel supone un punto muy positivo para contribuir a la conservación del medio ambiente y evitar la tala de árboles. Aunque actualmente muchas editoriales utilizan papel reciclado estos necesitan un tratamiento para que se obtenga el resultado final.

En la red hay multitud de obras gratis disponibles para descargar y no me refiero a las descargas ilegales, que eso es otro tema. Muchas webs ofrecen libros sin ningún coste. Claro está que no podremos acceder a los últimos títulos y novedades editoriales pero sí que podemos obtener clásicos u otras obras determinadas. También hay otros muchos títulos cuyo precio es muy asequible. Su precio es menor de tres euros.

Otra ventaja es que podemos adquirir los ejemplares en cualquier momento y sin desplazarnos de casa.

Para autores desconocidos se abre un filón porque pueden publicar sus obras a un precio mucho más bajo y sin pasar por las manos de un editor. A la vez no es necesario asumir el coste de distribución. Claro que en ocasiones esto disminuye la calidad del resultado final porque al no hacerse una buena corrección muchas erratas pasan por alto.

Entre los inconvenientes que yo le veo principalmente es que actualmente hay poca disponibilidad de títulos en el mercado digital. No todos los libros que se publican salen a la venta en ambos formatos. Y si hablamos de libros que tengan, por ejemplo, dos o tres años, es imposible encontrarlos (me refiero a descargas legales).

Y sobre el precio de los mismos es un tema que me parece bastante discutible. El invierno del mundo, la última novela de Ken Follet en formato papel cuesta 24,90 euros y su homólogo digital tiene un precio de 14,24 euros. ¿Realmente merece la pena para los amantes del libro? Yo no encuentro un equilibrio justo entre lo que pagas por un libro físico y por una copia digital, que al final ellos tienen un gasto mínimo en cuanto al soporte.

Otro inconveniente es que uno no puede compartir libros. El DRM es el sistema de protección que algunos los libros digitales para evitar que se puedan copiar. Tú compras el libro y tienes una única copia del mismo. No se lo puedes prestar a nadie y nadie puede hacerlo contigo, a menos que entregues el lector.

Pero a pesar de todo no se puede comparar con la sensación de pasar las páginas, el olor que desprende un libro, la sensación que te transmite su cubierta por lo que yo siempre me quedaría con el papel.

Y vosotros ¿Digital o papel?

lunes, 26 de noviembre de 2012

El reino del azahar - Linda Belago


Róterdam, 1850

Julie Van Vanderberg tiene nueve años. Después de perder a sus progenitores en un trágico accidente su tío, como único familiar, asume su tutela con cierta desidia y con el objetivo de poder alcanzar su cuantiosa herencia. Para deshacerse de la muchacha dispone de inmediato su ingreso en un internado femenino donde la muchacha crece sin ningún vinculo familiar y con el afecto de alguna compañera.

Cuando Julie cumple dieciocho años su tío decide casarla con un prospero productor de caña de azúcar asentado en Surinam. De esta forma que no solo se quita a la muchacha de en medio sino que encuentra la manera de sacarle provecho a la herencia. Gracias a su dote consigue saldar una deuda que amenaza con su ruina.

En poco tiempo se celebra la boda y Julie embarcará con su recién estrenado marido hacia Surinam. Karl Leevken es un hombre encantador y atractivo pero con cierto aire misterioso. Una vez en su nuevo hogar Julie deberá adaptarse al nuevo clima, a la vida en la plantación y sobre todo al trato que en ella reciben los esclavos.

Mi experiencia con la novela

Vengo observando de un tiempo a esta parte que han surgido un tipo de novelas que han sido denominadas como “landscape novels” o “novelas de paisajes” (prefiero nuestra nomenclatura) cuyo corte e incluso muchas de sus portadas resultan similares. Se trata de historias protagonizadas por mujeres y situadas en parajes muy exóticos. Estas novelas suelen contener un poco de todo, historia, algo de  aventuras, romance e incluso pueden resultar en cierto modo instructivas a la hora de conocer nuevos paisajes. Bajo estas características se encuentran títulos como “En el país de la nube blanca”, “En la tierra de fuego” o “El río de la fortuna”  entre otras. A mí, por ahora es un género que me convence.

“El reino del  azahar” pertenece a este tipo de novelas. Es verdad que su argumento, a estas alturas, no resulta novedoso  pero en su lectura podemos encontrar amor, emoción y aventuras con unos personajes capaz de infundirnos distintos sentimientos. No es una obra que se caracterice por tener una calidad altísima pero son perfectas para dejarse llevar y soñar. Yo he disfrutado mucho con su lectura y me he dejado atrapar complemente por la historia.

La editorial Temas de Hoy se desmarca del resto y nos sorprende con una portada de esas que te entran por los ojos. Me parece preciosa. No nos ofrece mucha información sobre la historia que contiene pero resulta evocadora y nos hace pensar en que nos llevará a un lugar exótico como en realidad resulta.

Aunque os voy a hacer una advertencia. Si tenéis pensado leer esta novela mi recomendación es que no os acerquéis a la sinopsis que propone la editorial porque resume casi el libro al completo y proporciona muchas claves de su desarrollo. Yo creo qu es mejor ir descubriendo la historia por uno mismo y a medida que avanza la lectura.

La historia narra como Julie, una niña de clase acomodada, pierde repentinamente a sus padres y cuando la tutela pasa a su tío este únicamente tiene el objetivo de hacerse con su cuantiosa herencia. Para desentenderse de ella la ingresa en un internado femenino hasta que cumple los dieciocho años y encuentra la manera de sacarle partido al capital que debería recibir Julie en un futuro. Para saldar una deuda termina casándola con un importante productor de caña de azúcar afincado en una plantación en Surinam en el continente Americano.

Julie tendrá que adaptarse a su nueva vida con un hombre que le atrae pero que en el fondo no conoce de nada. En la plantación el calor tropical y la humedad son insoportables, su vida social inexistente y el trato a los esclavos muy duro. La protagonista no puede evitar sentirse confundida sobre algunas de las costumbres de su nuevo país. Además tendrá que lidiar con los desaires de Martina, la hija de Karl y su prepotente novio Pieter que intenta hacerse un hueco en la plantación.

Pero allí no todo resulta tan malo porque Julie se encuentra muy a gusto entre los esclavos y siente que estos necesitan su ayuda. Amru, Kiri o Jenk que viven condenados a cumplir las órdenes de los blancos.

Como he dicho a priori el argumento no resulta novedoso y el punto de partida tampoco es espectacular pero cuando la historia avanza y comenzamos a conocer los personajes y los enredos que se producen entre ellos resulta una lectura muy amena y entretenida. Aunque todo gira en torno a la protagonista y su vida en la plantación hay otros tramas paralelas que también captan nuestro interés. Sabemos que la primera mujer de Karl murió en extrañas circunstancias, conocemos algunos misioneros que llegan al país para impartir la doctrina de la iglesia evangélica y las historias personales de algunos de los esclavos.

Los personajes son uno de los puntos fuertes de la novela. Incluso los secundarios están perfectamente perfilados y definidos. A lo largo de su novela resulta casi imposible no empatizar con algunos de ellos, y odiar a otros en cambio porque la autora siguiendo ciertos arquetipos los convierte en muy buenos o muy malos. Como suele suceder en este tipo de obras la presencia femenina está mucho más marcada, aunque sin los protagonistas masculinos no habría historia porque son esenciales. A diferencia de otras novelas, en esta sí que podemos disfrutar de su buena caracterización.

 Julie es la protagonista indiscutible y todo en ella hace que nos pongamos inmediatamente de su lado. Cuando comienza la historia es una chica joven, ingenua, conformista y maleable que nunca ha contando con el cariño y afecto de una familia. A medida que la novela avanza vemos como el personaje evoluciona, aprende a sacar sus garras y defender sus derechos. Pero sobre todo destaca por su gran humanidad, capaz de ayudar a quien la necesita y ponerse en el lugar de otros a pesar de que sus acciones normalmente conllevan unas consecuencias negativas.

Karl Leekven es un hombre marcado por la desgracia que le sucedió a su primera esposa. Un hombre de carácter voluble, recto y autoritario pero que sabe resultar encantador y atractivo según las circunstancias. Martina, su hija, es una joven caprichosa y testaruda que está a punto de casarse con su novio, un médico interesado y ambicioso.

También conocemos a la Kiri, una mulata que será la esclava de Julie, Amru, la vieja criada y su marido Jenk entre otros muchos personajes. A algunos de ellos es imposible no cogerles cariño.

El libro destaca por la sencillez en que se narra, sin frases complicadas y con las descripciones precisas que son aquellas que nos ayudan a profundizar en la historia sin resultar tediosas. La prosa es muy directa y en ocasiones algo pobre aunque lo compensa con la sensación de cercanía que produce en el lector y la sensación de agilidad en su lectura. Aunque hay bastante dialogo la parte narrativa se impone sobre ellos y gracias a su narrador en tercera persona podemos contar con mucha información sobre todo lo que ocurre.

La historia comienza en 1850 cuando Julie es tan solo una niña y abarca hasta el año 1863 cuando concluye la historia. Un periodo de tiempo corto pero muy intenso en el que los personajes sufren todo tipo de reveses. La lectura comienza de forma pausada y va adquiriendo fuerza a medida que avanza para terminar con un final donde hay muchísima más acción.

El contexto es otro punto fuerte de la novela. Se desarrolla en Surinam, un país del Sudamérica que en la época en que transcurre la historia fue una colonia de los Países Bajos y una de las principales proveedoras a Europa de caña de azúcar, café y algodón. Destacar las perfectas ambientaciones que podemos encontrar en la novela. La selva, las plantaciones, los viajes por el río e incluso la ciudad de Paramaibo están perfectamente descritas de forma que nos es muy fácil imaginar donde están los protagonistas.

A la vez introduce como fueron los últimos años en que la esclavitud estuvo vigente en este país cuando en el resto de Europa había sido abolida. Claro que no hay que olvidar que no deja de ser una novela de ficción situada en un contexto real y la autora se toma ciertas licencias literarias al respecto. La situación de los esclavos, la relación con el hombre blanco y el abuso por su parte está ampliamente tratado en la novela. Los cimarrones, los esclavos libres y los cautivos conviven y se relacionan con los colonos a muchos niveles.  Además nos ofrece algunos datos sobre su forma de vida, sus costumbres y algunas de las creencias de esta etnia.

Conclusión


“El reino del azahar” es una novela que va de menos a más. Comienza con una trama discreta que va enredándose poco a poco y lo completa con unos personajes atrayentes y una buena ambientación.

Como en toda novela de paisajes hay amor, desamor, secretos, odio, venganza. Un libro muy entretenido y absorevente que hará las delicias de los amantes del género.

Y recordar que aún tenéis tiempo de apuntaros al sorteo de esta novela que se celebra en este mismo blog.

** Gracias por el ejemplar a Temas de Hoy



sábado, 24 de noviembre de 2012

Disparatado asesinato en el Upper East Side - C. Pérez de Tudela


 Daphne tiene treinta y seis años y trabaja para una conocida revista de moda en Nueva York aunque aspira a dedicarse en un futuro a escribir artículos más serios.  Vive sola con su gata y lo último que desea en la vida es compartirla con un hombre. Desde que sufrió una  frustrante experiencia en su adolescencia con un novio ha decidido que los príncipes azules no van con ella y ha tomado la firme decisión de no enamorarse.

A causa del destino un día se reencuentra con Billy, el hombre que años atrás la abandonó sin más. El encontronazo la deja desconcertada y cuando se dirige a su despacho para aclarar qué es lo que ocurrió entre ellos presencia el asesinato de su ex novio. Pero por alguna extraña razón el cuerpo desaparece y nada parece indicar que lo que Daphne vio sucedió en realidad. Como nadie la cree ni corta ni corta ni perezosa decide que será ella quién descubra al asesino contando con una ayuda un poco peculiar.

Es así como empieza una historia cargada de disparates, situaciones extravagantes y enredos de locura. Una aventura que no dejará a Daphne indiferente.

 Mi experiencia con esta novela

Este libro llegó a mis manos a través de un sorteo organizado por el blog O meu Cartafol, a quién agradezco su organización.  Hasta ahora esta novela solo puede adquirirse a través de Amazon en formato digital pero ya ha sido fichada por una editorial y parece ser que el formato papel va a salir en los próximos meses al mercado. 

Por mucho que he buscado en la red muy poco es lo que he podido averiguar de este criminólogo que comenzó escribiendo novelas de intriga y ha terminado por escribir una extraña novela que mezcla diversos géneros. De alguna manera  este libro condesa el humor, la intriga y el Chick lit. Un género hasta ahora exclusivo entre las  mujeres pero que Pérez de Tudela ha roto esta tendencia siendo esta la primera novela perteneciente al mismo que podríamos decir que está escrita por un hombre.

Son muchos los escritores masculinos que adoptan un personaje femenino para protagonizar sus novelas y no siempre consiguen recrear ese mundo de forma adecuada.  

Lo primero que me viene a la mente después de leer “Disparatado asesinato en el Upper East Side” es que es una novela de excesos. Tanto en la caracterización de los personajes, en la creación de situaciones embarazosas y el propio argumento en sí. Pero vamos a analizar este punto por partes.

La novela gira alrededor de Daphne, su protagonista. Es una treintañera que a pesar de trabajar en la prestigiosa revista de moda In Style es muy poco coqueta. Su relación con los hombres es complicada desde que en la adolescencia viviese una horrible experiencia que le hizo que tomar la decisión de no volver a enamorase.  

Y es que su novio del instituto, Billy, terminó por abandonarla en un momento crucial en su vida cuando mayor apoyo necesitaba. A partir de ese momento nunca volvieron a verse.

Después de producirse el encuentro fortuito, Daphne está más que decidida a obtener una explicación que le aclare que sucedió entonces, cuáles fueron las razones por las que Billy la dejó plantada. Pero cuando se dirige a su encuentro escucha como le disparan a bocajarro.  Una vez desaparecido el cuerpo y siendo consciente de que nadie va a creerla si no consigue pruebas, Daphne comenzará a indagar en lo sucedido.  

En mi opinión la novela trata de parodiar el género Chik lit y para ello incurre en todos los tópicos habidos y por haber en el mundo femenino. Y para ello se apoya las cuestiones más clásicas (ropa, maquillaje, menstruación), el típico amigo gay, las rivalidades entre mujeres, la típica gata de compañía o las bragas kilométricas.  

Si lo tradicional en el Chick lit es que sus protagonistas se vuelvan locas por las compras y busquen su príncipe azul a toda costa, Daphne se caracteriza por ser todo lo contrario. No es nada coqueta, odia perder tiempo en revisar su vestuario y lo último que desea en la vida es encontrar el príncipe azul.  Es cierto que no cumple algunos de los preceptos pero solo hay que darle tiempo a la historia y que la protagonista encuentre su sitio.  

Como os decía la novela cuenta con muchos tópicos referentes al mundo de la mujer en general.  Y como podéis imaginar uno de los temas al que el autor saca mas partido es la menstruación. La historia abarca varios días pero la protagonista no puede olvidarse de ella ni un solo momento.  Varias veces se queda sin tampones y debe recurrir al auxilio de compañeras. En una escena concreta después de pasar 24 horas sin cambiárselo resulta que se le rompe ¿Alguien me puede explicar si esto puede ocurrir en realidad?. En otra escena se pone una compresa al revés (sí, con la pega hacía arriba) y no se da cuenta hasta pasadas algunas horas…. Le hubiese venido bien documentarse algo más en ciertos aspectos. 

Soy consciente de que es una novela de humor y muchas veces esto se consigue a través de la exageración pero es que en esta novela no hay ningún tipo de mensura. Todo me ha resultado demasiado obvio en ella.  

Los protagonistas son tan extraños y exagerados como la historia. A parte de Daphne encontramos a Josh, su mejor amigo. Es el típico gay que siempre está rodeado de mujeres y que continuamente consuela a la protagonista de sus desavenencias. También esta Ashley, una mujer algo tonta que provoca situaciones muy confusas. Suele montarse muchas paranoias con respecto a los hombres, enamorándose perdidamente a primeras de cambio. Otro personaje es Marion Klein, una escritora adicta al alcohol que vive en un mundo lleno de fantasía.  

La novela está narrada en primera persona a través de Daphne, la protagonista de la historia. Con un estilo ágil y desenfado, incluso yo diría demasiado entusiasta, con mucha presencia de diálogos y un vocabulario muy sencillo la novela es una sucesión de situaciones imposibles en que los protagonistas se ven envueltos. El libro se torna más surrealista por momentos y las situaciones se vuelven poco a poco mas estrambóticas en cada página.

Pero como ya se sabe, lo poco agrada y lo mucho cansa. Como os decía al principio considero esta una novela de excesos. Si en un principio la novela me pareció divertida después de pasar varias veces por situaciones bastante parecidas llegó a cansarme tanta situación forzada en tan poco espacio de tiempo, tanta exageración y ese toque imposible que tiene la historia.  Para mi gusto le sobraban unas cuantas páginas. Me ha dado la sensación que la historia tiene  mucho relleno y muchas situaciones que no aportan nada a la novela. 

Una puntualización. En el libro hay tantas faltas de ortografía, errores gramaticales, ausencias de acentos que llega un momento que resultan una gran molestia para su lectura. No suelo darle demasiada importancia cuando en algún libro hay alguna errata pero esta novela me ha superado. No entiendo cómo se puede ofrecer un libro sin pasarle un corrector.  

A lo largo del argumento se realizan muchos guiños a series como Gossip Girl, El secreto de Verónica (la serie de Kristie Allie) y a la  novela Loca por las compras de Sophie Kinsella. Incluso una de sus protagonistas, Marion Klein, nos recuerda claramente a la reina del Chick lit, Marian Keyes, que incluso escribe una novela titulada Surimi para principiantes emulando a la publicación de Keyes. 

La novela se desarrolla en el Upper East Side, uno de los distritos con mas glamur de Manhattan. Los protagonistas se mueven en el mundo de la moda, la televisión y acuden a las fiestas más exclusivas rodeados de personas importantes. Están muy bien descritos los escenarios  a pesar de que he leído por ahí que el autor no conoce la zona.  

El final se resuelve a través de un epílogo que resume cómo terminan los protagonistas que a excepción de la principal  su evolución no es muy notable. El final me ha parecido uno de los peores puntos porque desde sus primeras páginas se ve venir.

 Conclusión

 “Disparatado asesinato en el Upper East Side” me parece una novela  que se deja leer si uno no es demasiado exigente. Divertida en algunas ocasiones y algo “cansina” en otras es una lectura que cuenta con cierta originalidad pero cuyo desarrollo podría haber estado mas logrado.

jueves, 22 de noviembre de 2012

La vida de una rosa - Laura Tejo


Laura Tejo, la protagonista de esta historia murió en el año 2003. Tres semanas después el abogado de Laura entrega a uno de sus nietos un grueso paquete de folios escrito por la protagonista en sus últimos años de vida y donde narra sus memorias.

En ellas Laura hace un repaso por los acontecimientos más importantes de su vida. Su nacimiento en León en el año 1918, su dorada infancia que transcurrió felizmente y abrigada en el seno de una familia afortunada y su paso por una su adolescencia marcada por la situación política del momento. Laura vivió en sus propias carnes la Segunda República y la Guerra Civil durante la cual se enamoró de un piloto de guerra alemán de la legión Cóndor. Un hombre que cambiaría su vida para siempre y la llevaría a una vida totalmente distinta a la que había experimentado hasta entonces.

A través de este testimonio conocernos como la autora vivió momentos felices, trágicos y amargos a la vez que seremos participes de la recreación de toda una época. Junto a ella viajaremos a diversos lugares del mundo y conocernos otras formas de vivir.

Mi experiencia con la novela

Cuando Beabela Books, una pequeña editorial malagueña que no conocía hasta entonces, me ofreció la novela no dudé un segundo en aceptar su lectura. La portada es sencilla y evocadora con el templo de Prambanan en Indonesia como telón de fondo. El que la novela relatara la vida de una mujer real fueron otros de los alicientes que me incitaron a acercarme a ella.
Os adelanto que la novela me ha gustado muchísimo, sobre todo la segunda parte en la que ocurren muchas cosas. El final me ha dejado simplemente sin palabras.

“El remordimiento es un gusano que te corroe las entrañas sin piedad”

Así es como comienza la historia de Laura Tejo, tras un pequeño prólogo en el que Martin, su nieto, nos aclara como llegaron estas memorias a sus manos. Una frase cargada de intención, de culpabilidad y misterio que será el hilo conductor que nos lleve a desentrañar como fue la vida de su protagonista.  Laura en sus últimos años de vida no quiso que todos sus secretos se enterraran con ella y gracias a su esfuerzo esta novela ha visto la luz.
Este testimonio quizá surgió de la necesidad de expiar sus pecados, tal vez solo deseaba que su familia conociese su vida. Sea como fuere este libro deja constancia de todo lo que vivió, de los lugares que conquistaron su corazón y sobre todo de los hombres que fueron importantes en su vida.  
Laura Tejo reconstruye su vida con tranquilidad y sosiego, deteniéndose en aquellos momentos que considera importantes o que la marcaron definitivamente. Fue una niña con suerte. Creció en una buena familia donde no solo le faltó de nada sino que vivió en un ambiente de cariño y respeto. Su padre, un médico con gran vocación, fue un hombre honrado, culto y tolerante que intentó inculcar a sus tres hijos los mismos valores.
El comienzo de la historia nos lleva de la mano por sus primeros recuerdos, como era León en los años veinte, sus primeras experiencias en el colegio y más tarde en el instituto. Mientras en España la población vivía el hambre, la incertidumbre y las injusticias Laura vivía protegida por sus padres.

Durante la Guerra Civil española se enamoró de un teniente alemán de la Legión Cóndor. Un piloto de guerra que conquistó su corazón de forma instantánea y por quien abandonó todo. Se marchó de León, dejó su familia y se trasladó a Berlín, una ciudad que le recibió con los brazos abiertos pero que estaba a punto de entrar en guerra.
Con el inicio de la segunda guerra mundial su vida cambia irremediablemente y es cuando comienza a vivir las experiencias más duras y que terminarían por marcar definitivamente su vida.
La novela está narrada en primera persona y su prosa es bastante descriptiva. Los diálogos son casi inexistentes aunque no por ello se ralentiza su lectura. Me ha sorprendido el lenguaje tan cuidado que utiliza la autora durante todo el relato. El estilo, la prosa, el vocabulario me hace pensar que fue una mujer muy culta  y con gran capacidad para expresarse. Se nota que Laura tuvo la oportunidad de estudiar y su procedencia de una familia acomodada. Se percibe que el relato ha sido construido con mucho tiento y cuidando los detalles al máximo pero esta característica hace que en ocasiones nos sintamos algo distanciados de la protagonista y levantan una especie de barrera entre el lector y la protagonista. El objetivo de la novela es que su nieto conozca cómo fue su vida y aunque Laura está escribiendo para él su manera de dirigirse al mismo es demasiado formal y no tan cariñosa como cabria esperar.
La historia está perfectamente ambientada. No sólo conoceremos León y algunas ciudades de Alemania sino que junto a ella viajaremos a muchos otros lugares del mundo. Algunos muy exóticos que quedaron en su retina para siempre. Es muy fácil imaginase como sucedió todo pero en este sentido le encontrado una pequeña pega y es que está documentada en exceso. La autora confiesa que mientras escribía buscó información para completar el relato y como resultado encontramos demasiadas fechas exactas, demasiados nombres de aviones y escuadrones militares así como muchos datos sobre la guerra. Considero estos datos no solo son prescindibles sino que en ocasiones ralentizan e incomodan su lectura. Sin ellos el relato hubiese ganado. 
La novela se divide en dos partes, cuyo punto de inflexión es el traslado de Laura a Berlín totalmente enamorada y junto a su marido. Su historia de amor no es especialmente romántica ni impresionante pero se percibe claramente la pasión que anidaba entre ellos. Cuando se conocieron su destino era incierto pero estaban dispuestos a luchar por mantenerse unidos. Así Laura hace una reflexión basada en un poema de Goethe:

"La vida de una rosa es corta, pronto se marchita. Cuando se encuentra en la plenitud deslumbra por su belleza. Pero es delicada y está rodeada de espinas. ¿Sería así nuestro amor?" (Página 123)

 En sus vivencias Laura Tejo pasa por dos grandes guerras, la Civil española y la Segunda guerra mundial. Su testimonio en cuanto a cómo se desarrollo la primera la primera es bastante parco y se centra en como afectó el conflicto a su familia. Durante la recreación de la segunda es cuando comienza la parte más dura en la historia. No solo nos relata esta parte con todo lujo de detalles y de forma muy concreta sino que sus vivencias se tornan muy interesantes. No quiero contar nada más para no destripar el libro.

Laura fue una niña rica pero también una mujer con mucha fuerza y mucho coraje. A lo largo de la historia notamos una clara evolución en ella. Si al principio era una muchacha romántica y soñadora al final la vemos convertida en una mujer práctica y decidida. El personaje me ha gustado mucho, me ha parecido una mujer juiciosa, culta y valiente. Además es capaz de narrarnos toda la historia sin verse involucrada en ninguna cuestión política, sin posicionarse y sin valorar lo que estaba ocurriendo. Simplemente fue una víctima más de todo el despotismo de unos cuantos políticos. También fue una mujer capaz de amar con mucha intensidad y llevar todas sus intenciones hasta un extremo. Es capaz de seguir a su marido hasta distintos lugares del mundo dejando atrás siempre su vida.
Una de las cosas que más me ha gustado de la novela ha sido su final. Totalmente inesperado y emotivo, quizás y a pesar de todas las vivencias de la protagonista lo más impactante de la novela. Un cierre perfecto para una buena historia.

Muchos cuestiones y detalles me hacen sospechar que esta novela puede no ser lo que parece, es decir, en muchos puntos he dudado de que realmente fuese Laura un personaje de carne y hueso y su historia real. Hay diversos puntos que nos son coherentes. Por un lado hace hincapié en que Helmut, el piloto, no habla correctamente español pero después hace un uso bastante bueno de nuestro idioma a través de las cartas que escribe o quizás tan solo tengo esta perfección porque la autora se esmeró tanto en darle forma al relato que eliminó todos sus errores.
De todas formas, creo que es algo escrito para que vea la luz y no como una epístola a un ser querido.
Conclusión

“La vida de una rosa” es una novela totalmente recomendable. Tiene un argumento interesante, con un estilo cuidado y un compas bastante bueno que hace que la novela sea una buena obra a tener en cuenta.

Quizás le falte calor al relato y le sobren algunos datos pero os animo a que le deis una oportunidad.


** Gracias por el ejemplar a:
 

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Algo muy grave va a suceder en este pueblo - Gabriel García Márquez


«Imagínese usted un pueblo muy pequeño donde hay una señora vieja que tiene dos hijos, uno de 17 y una hija de 14. Está sirviéndoles el desayuno y tiene una expresión de preocupación. Los hijos le preguntan qué le pasa y ella les responde: 

-No sé, pero he amanecido con el presentimiento de que algo muy grave va a sucederle a este pueblo.
Ellos se ríen de la madre. Dicen que esos son presentimientos de vieja, cosas que pasan. El hijo se va a jugar al billar, y en el momento en que va a tirar una carambola sencillísima, el otro jugador le dice:

-Te apuesto un peso a que no la haces. 

Todos se ríen. Él se ríe. Tira la carambola y no la hace. Paga su peso y todos le preguntan qué pasó, si era una carambola sencilla. Contesta: 

-Es cierto, pero me ha quedado la preocupación de una cosa que me dijo mi madre esta mañana sobre algo grave que va a suceder a este pueblo. 

Todos se ríen de él, y el que se ha ganado su peso regresa a su casa, donde está con su mamá o una nieta o en fin, cualquier pariente. Feliz con su peso, dice:
-Le gané este peso a Dámaso en la forma más sencilla porque es un tonto.

-¿Y por qué es un tonto? 

-Hombre, porque no pudo hacer una carambola sencillísima estorbado con la idea de que su mamá amaneció hoy con la idea de que algo muy grave va a suceder en este pueblo.

Entonces le dice su madre: 

-No te burles de los presentimientos de los viejos porque a veces salen.
La pariente lo oye y va a comprar carne. Ella le dice al carnicero: 

-Véndame una libra de carne -y en el momento que se la están cortando, agrega-: Mejor véndame dos, porque andan diciendo que algo grave va a pasar y lo mejor es estar preparado. 

El carnicero despacha su carne y cuando llega otra señora a comprar una libra de carne, le dice: 

-Lleve dos porque hasta aquí llega la gente diciendo que algo muy grave va a pasar, y se están preparando y comprando cosas. 

Entonces la vieja responde: 

-Tengo varios hijos, mire, mejor deme cuatro libras.
Se lleva las cuatro libras; y para no hacer largo el cuento, diré que el carnicero en media hora agota la carne, mata otra vaca, se vende toda y se va esparciendo el rumor. Llega el momento en que todo el mundo, en el pueblo, está esperando que pase algo. Se paralizan las actividades y de pronto, a las dos de la tarde, hace calor como siempre. Alguien dice:
-¿Se ha dado cuenta del calor que está haciendo? 

-¡Pero si en este pueblo siempre ha hecho calor! 

(Tanto calor que es pueblo donde los músicos tenían instrumentos remendados con brea y tocaban siempre a la sombra porque si tocaban al sol se les caían a pedazos.)
 
-Sin embargo -dice uno-, a esta hora nunca ha hecho tanto calor. 

-Pero a las dos de la tarde es cuando hay más calor.

-Sí, pero no tanto calor como ahora.
Al pueblo desierto, a la plaza desierta, baja de pronto un pajarito y se corre la voz: 

-Hay un pajarito en la plaza.

Y viene todo el mundo, espantado, a ver el pajarito. 

-Pero señores, siempre ha habido pajaritos que bajan. 

-Sí, pero nunca a esta hora.
Llega un momento de tal tensión para los habitantes del pueblo, que todos están desesperados por irse y no tienen el valor de hacerlo.

-Yo sí soy muy macho -grita uno-. Yo me voy.
Agarra sus muebles, sus hijos, sus animales, los mete en una carreta y atraviesa la calle central donde está el pobre pueblo viéndolo. Hasta el momento en que dicen: 

-Si éste se atreve, pues nosotros también nos vamos.

Y empiezan a desmantelar literalmente el pueblo. Se llevan las cosas, los animales, todo.
Y uno de los últimos que abandona el pueblo, dice: 

-Que no venga la desgracia a caer sobre lo que queda de nuestra casa -y entonces la incendia y otros incendian también sus casas.

Huyen en un tremendo y verdadero pánico, como en un éxodo de guerra, y en medio de ellos va la señora que tuvo el presagio, clamando:
-Yo dije que algo muy grave iba a pasar, y me dijeron que estaba loca.»
 
Este cuento, de Gabriel García Márquez nos enseña de forma sencilla el daño que puede hacer la rumorología en la sociedad. Como una simple frase va pasando de boca en boca, cambiando a su paso en cada una de ellas y creando una situación totalmente disparatada.
 

martes, 20 de noviembre de 2012

El tiempo que nos une - Alejandro Palomas

Mencía tiene noventa años, y aunque está cansada y la edad no perdona, sigue en guardia, rabiosamente empeñada en velar “por los suyos” a cualquier precio, hasta que el tiempo y las fuerzas se lo permitan. Menorca, Madrid, Barcelona, Copenhague…, ningún lugar es demasiado lejos si hay que acudir en ayuda de la callada Lía para que acepte la muerte de su hija mayor y librarla por fin de la culpa que no la deja vivir, o de la arisca Flavia, para que apueste por su propia felicidad en el otro extremo del mundo y conozca por fin un amor que la haga grande. Nada ni nadie será capaz de poner freno a la inconmensurable Mencía cuando, sacando fuerzas de flaqueza, decida salvar a su nieta Inés de un triste final y la recupere para la vida, ni cuando se empeñe en labrar para Bea y su pequeña Gala un futuro mejor por el que nadie parece apostar.

Novela conmovedora y coral, he aquí la historia de cuatro generaciones de mujeres que ríen y lloran, que viven y sufren, pero que sobre todo se necesitan por encima de todas las cosas. Con mil matices y registros, Alejandro Palomas nos ofrece con El tiempo que nos une una historia que entrelaza el amor de madres a hijas, dea vuelas a nietas y entre hermanas: una novela de emociones sobre unas mujeres únicas que desborda humor, cariño, sabiduría y valor.

Mi experiencia con la novela

Esta lectura llegó a mis manos a través de un sorteo publicado en el blog Libros que voy leyendo, del cual afortunadamente fui ganadora de un ejemplar. Y hoy vengo con la lectura conjunta que se ha organizado desde el mismo blog. Así que si mi punto de vista no resulta determinante sobre la lectura o no de esta novela siempre podréis recurrir a otras reseñas.

Después de leer la novela puedo decir que me he quedado con dos sensaciones distintas. Una me acompañó durante gran parte de la misma y la otra es la que me dejó el final de la historia. Me parece que la novela tiene un buen comienzo, muy emotivo y muy profundo, incapaz de dejar indiferente a nadie. Incluso ha llegado a conmoverme y emocionarme en varias ocasiones (y esto es muy difícil que me ocurra) pero en el último tercio la novela se me hizo un poco cuesta arriba. Quizás la falta de movimiento que tiene llegó a cansarme. Es cierto que es una novela dominada por los sentimientos, que explora los corazones de cinco mujeres y se podría llegar a pensar incluso que la acción no tiene cabida pero, en mi opinión, de las casi seiscientas páginas que tiene algunas están de más. En la novela ocurren muy pocas cosas en sí y llega un momento en que la historia no avanza, los personajes evolucionan mínimamente y se vuelve un poco repetitiva. Eso sí, a pesar de ello, la historia cuenta con suficientes alicientes para acercarse a ella.

Se trata de una novela coral que narra la historia de cinco mujeres muy especiales. Cinco mujeres de la misma familia que viven atormentadas por la pérdida de dos seres queridos. Estas personas desaparecidas son hijos, nietos, sobrinos y hermanos de las protagonistas. ¿Cómo se puede superar la pérdida de un hijo? No, sencillamente no se puede y estas cinco mujeres lo tienen muy claro.

Mencía, Flavia, Lía, Inés y Bea. Cinco nombres, cinco mujeres. Cada una de ellas tiene una manera distinta de enfrentarse al dolor. Unas lo hacen huyendo en el más absoluto silencio, alejándose de todo aquello que les hace sentir mal y que les trae recuerdos que dañan el corazón, otras deciden encerrarse en sí mismas y otras deciden sacar toda su fuerza y su temperamento hacía el exterior.

Las relaciones entre ellas son muy complicadas. Los silencios, los secretos, lo no dicho en muchas ocasiones termina por  levantar una barrera entre las protagonistas pero al final son conscientes de que se necesitan las unas a las otras porque ninguna cuenta con otro apoyo posible. El principal problema que tienen es su falta de comunicación, la incapacidad de expresarse y sacar sus problemas a flote. Esas cuestiones y sentimientos imposibles de describir, esas palabras que cuesta tanto pronunciar en voz alta y que hacen que algo de repente se vuelva realidad. En ocasiones parece que si nos callamos un secreto no existe. Si nadie conoce su existencia pierde importancia. Pero, si en cambio, lo pregonamos al viento se vuelve más tangible, más complicado de superar.

“Me pregunto quién coño les habrá dicho a estas mujeres que sufrir en silencio te hace mejor. Cómo meterles en la cabeza que el silencio no engrandece que eso es mitología griega. El silencio coarta, desquicia, enmudece, enferma. Eso lo sabemos bien las viejas. Y, bien pensado, y después de todo lo vivido, qué paradoja tener que llegar a mi edad para entender tantas cosas. Qué paradoja tanta lucidez rodeada de tanto callar” (Página 97)

Quizás la que mayor peso o protagonismo tenga en la historia sea Mencía, una anciana de noventa años a quien el paso del tiempo y las vivencias sufridas han forjado un carácter muy fuerte. Su principal preocupación es ayudar a los suyos en el tiempo que le queda, desplegar un manto protector en su último aliento. Ha sufrido con la perdida de una nieta y ha visto como su propia hija, Lía se hundía con ello. Su otra hija, Flavia, mantiene una extraña relación de amor-odio hacia ella que le hace alejarse y volver a su lado continuamente.

La historia se repite cuando Inés, hija de Lía y nieta de Mencía, pierde a su hijo de ocho años. Toda la familia intenta arroparla pero su primer impulso es huir de todo lo que cause daño, de los recuerdos. Esta dispuesta a abandonarse y permitir que el dolor la coma e impida seguir con su vida. ¿Qué se puede decir a alguien que ha sufrido semejante desgracia? ¿Qué palabras de consuelo existen para estos casos?

Es imposible quedarse indiferente ante esta novela, porque rebosa sensibilidad y emociones. Es un relato duro, como lo es la propia vida. Es muy complicado ponerle palabras a los sentimientos, analizar el interior con exactitud.

Alejandro palomas es capaz de recrear un universo femenino con mucha maestría. A la vez que avanza el relato iremos conociendo a estas cinco mujeres. Todas ellas muy diferentes entre sí. Para sobrevivir tienen que librar algunas batallas, en ocasiones en solitario y en ocasiones podrán unir sus fuerzas. Destaca la capacidad del autor para definir estos cinco personajes de forma asombrosamente clara. Sus miedos principales, su forma de actuar, sus metas (si es que ya les queda alguna) son los puntos clave que nos ayudaran a hilvanar toda la historia.

No he sido capaz de conectar con Mencía incluso me ha resultado bastante desagradable en algunas escenas en concreto. Es una anciana con una inusual vitalidad a su edad capaz de luchar para defender a los suyos. Pero lo cierto es que es un personaje hiriente y en ocasiones maleducado capaz de arrojar sin pudor una verdad desnuda a cualquiera que ella considere necesario. Haciendo daño a los demás de forma gratuita uno no gana nada, ni siquiera me parece que es la forma de defenderse.

La historia está contada en primera persona con capítulos que otorgan la voz a sus distintas protagonistas. Como conocemos todo lo que ocurre desde distintos ángulos accedemos a una información a varios niveles y nos ayuda a darnos cuenta de que un mismo gesto o una simple palabra puede interpretarse de distintas formas según se mire.

Me ha dado un poco de pena que la novela se alargara tanto. Como os he dicho, lo que comienza como una historia capaz de encogerte el corazón termina siendo una novela que se alarga demasiado en su extensión.

Conclusión

A pesar de mi sensación final es una novela que recomiendo y que creo que merece la pena leer. Es un relato cargado de sentimientos, de emociones que analiza con bastante crudeza las relaciones familiares entre cinco mujeres tocadas por la desgracia y el dolor.

Aunque a esta novela no podría darle la máxima nota, me apetece mucho seguir descubriendo a este autor y seguro que en un futuro me aproximaré a otras de sus novelas.